Transparencia pesquera: una de las claves para proteger el mar argentino

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La transparencia en la gestión pesquera es una herramienta vital para asegurar que esta actividad se desarrolle de manera sostenible. Sin una visión clara y accesible sobre cómo se maneja la biodiversidad marina, es muy difícil evitar la sobreexplotación, la pesca ilegal y la mala distribución de los beneficios que la pesca genera. En Argentina, la falta de transparencia ha permitido que el sector pesquero opere en la sombra, con pocos controles y muchas irregularidades. Esta situación pone en riesgo no solo a los ecosistemas marinos, sino también al bienestar económico y social del país.

¿Por qué es tan importante la transparencia en la pesca?

En un mundo donde la sostenibilidad de los recursos naturales es cada vez más urgente, el manejo adecuado de los recursos pesqueros es crucial. La transparencia es fundamental para conocer cuántos barcos están pescando, qué especies están capturando y si lo hacen dentro de los límites establecidos. Sin esta información disponible de forma pública, clara y accesible para todos, no hay forma de verificar si se están cumpliendo las cuotas recomendadas por los científicos o si se están respetando los procesos de la biodiversidad marina.

La transparencia no solo asegura que la pesca sea sostenible, sino que también garantiza una distribución justa de los beneficios. Cuando no se sabe quiénes controlan el sector, cuánto capturan o cómo se reparten los permisos, los beneficios tienden a concentrarse en pocas manos, dejando a muchos fuera del sistema. Además, cuando no hay un control efectivo, las prácticas ilegales como la subdeclaración de capturas, los descartes en el mar o el fraude en la comercialización se vuelven más frecuentes.

La situación en Argentina

A pesar de contar con más de 4.500 kilómetros de litoral, el sector pesquero en Argentina ha sido históricamente relegado en la agenda pública y gubernamental. El consumo de pescado en el país es muy bajo, apenas 5 kg por habitante al año, frente a los 20 kg que se consumen en promedio a nivel mundial. A su vez, más del 90% de las capturas se destinan a la exportación, generando divisas comparables, en algunos años, con las del sector cárnico. Sin embargo, a pesar de esta importancia económica, la pesca no ha sido priorizada por los distintos gobiernos nacionales.

La falta de transparencia en el sector se manifiesta en varios frentes. Las flotas pesqueras argentinas, muchas de ellas controladas por capitales extranjeros, operan con escasa fiscalización y un control mínimo de las capturas. Los datos sobre cuántos barcos pescan, qué especies capturan y quiénes son los dueños de estas flotas no están fácilmente disponibles para el público. Esto no solo dificulta la participación ciudadana en la toma de decisiones, sino que también permite que se cometan irregularidades sin que nadie lo note.

La Auditoría General de la Nación ha señalado en numerosas ocasiones las fallas en la gestión pesquera en Argentina. Buques sin permisos, inspectores insuficientes y datos de captura que se basan únicamente en lo que declaran las empresas son solo algunas de las irregularidades denunciadas. Incluso muchas de las balanzas utilizadas para medir las descargas de pescado pertenecen a las mismas empresas que están siendo controladas, lo que abre la puerta a posibles fraudes.

Extranjerización y concentración de la flota

Otro de los grandes problemas del sector pesquero en Argentina es la concentración y extranjerización de la flota. Desde la década de los 90, inversiones extranjeras, principalmente de capitales españoles, chinos y coreanos, han adquirido una porción significativa del sector. En algunos casos, estas empresas tienen vínculos con flotas que realizan pesca ilegal fuera de las 200 millas de la Zona Económica Exclusiva de Argentina. Este proceso ha ocurrido casi sin que la ciudadanía lo note, en gran parte debido a la falta de transparencia.

A pesar de que el recurso pesquero es un patrimonio de todos los argentinos, pocas personas tienen acceso a información básica como cuántos barcos están autorizados a pescar o cuáles son las especies que están capturando. Esta falta de información impide que se pueda hacer un seguimiento adecuado de la sostenibilidad del recurso, y abre la puerta a la sobreexplotación y a una distribución injusta de los beneficios.

El rol clave de la información accesible

Para que la pesca en Argentina sea sostenible, es esencial que la información sobre el sector sea pública y de fácil acceso. No debería ser necesario ser un especialista ni atravesar complejos trámites burocráticos para saber cómo se está manejando este recurso. En Argentina, estos datos suelen estar dispersos en actas y resoluciones difíciles de encontrar, y a menudo no están actualizados. Cubiertos por densas capas de trámites y ocultos en los laberínticos vaivenes burocráticos.

Además, la falta de publicación de los informes científicos sobre el estado de las poblaciones de peces y los ecosistemas marinos es una práctica común en las administraciones nacionales y provinciales. Esta falta de transparencia no solo limita la capacidad de los ciudadanos para monitorear el manejo de los recursos, sino que también debilita la toma de decisiones basada en la ciencia.

Un cambio necesario

Avanzar hacia una mayor transparencia en el sector pesquero no es solo una cuestión ambiental, sino también social y económica. La pesca es un recurso valioso que, si se gestiona adecuadamente, puede generar empleo, ingresos y seguridad alimentaria para muchas comunidades costeras. Sin embargo, si se sigue manejando en la oscuridad, se corre el riesgo de agotar el recurso y dejar a esas mismas comunidades sin sustento.

La implementación de estándares de transparencia en la pesca es urgente. Hacer que la información sea accesible para todos, garantizar que los controles sean efectivos y que los datos sobre las capturas sean confiables es el primer paso para asegurar un futuro sostenible para la pesca en Argentina.

Presentación de “La Carta Mundial para la Transparencia de la Pesca”

En esta línea, el 26 de septiembre de 2024, la Coalición para la Transparencia de la Pesca (Coalition for Fisheries Transparency) presentó la versión en español de su informe “La Carta Mundial para la Transparencia de la Pesca. Un marco para la colaboración, la justicia y la sostenibilidad” en un evento virtual organizado por el Círculo de Políticas Ambientales y Sin Azul No Hay Verde, destinado a gobiernos, organismos nacionales e internacionales, organizaciones no gubernamentales y empresas, entre otros, de América Latina y el Caribe. El informe detalla los diez principios propuestos por la Coalición para garantizar la transparencia en el sector pesquero, describiendo el contexto de cada uno, proporcionando recomendaciones prácticas para la acción por parte de los gobiernos y las organizaciones de la sociedad civil, así como mostrando ejemplos del mundo real y sus aplicaciones.

En el informe la transparencia de la pesca no solo abarca la publicación de información y datos completos sobre pesquerías por parte de los gobiernos sino también la accesibilidad y usabilidad de estos datos por parte de las partes interesadas. Lo ideal sería que la información y los datos estuvieran disponibles en bases de datos electrónicas fáciles de usar y con adaptaciones para quienes no tengan acceso a internet y (…) que faciliten la participación de todos los interesados” señaló Agata Mrowiec, responsable de comunicación de Coalition for Fisheries Transparency.

Por su parte, Milko Schvartzman del Círculo de Políticas Ambientales señaló que “lo que se pesca no debería ser un secreto” y Lucía Castro, de Sin Azul No Hay Verde, adelantó que ambas organizaciones estarán trabajando por la implementación de un registro público de embarcaciones pesqueras en la Argentina.

La Carta Mundial para la Transparencia de la Pesca es un marco de referencia para que los gobiernos lleven a la legislación y la práctica reformas en las políticas de transparencia. Además, adopta una comprensión completa de la transparencia, que va más allá de la mera recopilación y suministro de datos, y hace hincapié en el uso de datos para permitir una participación más informada por parte de la sociedad civil y otros interesados. Este enfoque permite actuar en todo el sector pesquero e influir en los procesos de toma de decisiones a escala mundial.

La Coalition for Fisheries Transparency fue creada en 2022 y es una voz de las organizaciones de la sociedad civil de todo el mundo que buscan avanzar en la transparencia y la responsabilidad en la gobernanza y gestión pesqueras.